Ave y Mito

Ave y Mito

Año II  N° 13

Agosto de 2018

Texto: Alicia Grela Vázquez

Imagen: Elsa Sposaro

El jabalí de Erimanto - César von der Wetter

SUMARIO

El Cóndor

Los trabajos de Hércules 2ª Parte

El Cóndor

EL Cóndor

Yo soy el cóndor, vuelo

sobre ti que caminas

y de pronto en un ruedo

de viento, pluma, garras,

te asalto y te levanto

en un ciclón silbante

de huracanado frío.

Y a mi torre de nieve,

a mi guarida negra

te llevo y sola vives,

y te llenas de plumas

y vuelas sobre el mundo,

inmóvil, en la altura.

Hembra cóndor, saltemos

sobre esta presa roja,

desgarremos la vida

que pasa palpitando

y levantemos juntos

nuestro vuelo salvaje.

Pablo Neruda

El Condor Pasa

En el imperio incaico
el indio está,
sin luz, sólo está,
triste está.

Detrás de los silencios quedará

jamás, nunca más, volverá.
El inca ya se fué,
a morir rumbo al sol,
y en su alma un condor va
a llorar su dolor volando

Vuela, vuela el cóndor
la inmensidad, sombra de la altipampa.
Sueño de la raza americana
sangre de la raza indiana

El inca há sido traicionado,
llorando las quenas están.
La Pachamama al coya enseño
a morir por la libertada!

Los trabajos de Hércules 2ª Parte

Es necesario justificar la realización de los Trabajos de Hércules. Ellos se deben a un conjunto de hechos que llevaron a ello. A saber: Creonte en reconocimiento por la victoria obtenida, ofreció sus hijas a Hércules y su hermano Ificles.  El semidiós tomó a Megara como esposa. Con ella tuvo tres hijos varones: Terímaco, Creontíades y Deicoonte. Paralelamente, Ificles esposó a Automedusa, a la que, después de procrear a sus tres niños, abandonó.

Hércules matando a sus hijos – A. Turchi

También se dice que Hera lo indujo a la locura que lo hizo asesinar a su esposa, sus hijos y dos de los de su hermano. Sólo sobrevivió su sobrino Yolao. Horrorizado por su sangrienta masacre, se hubiese suicidado, pero el oráculo de Apolo le dijo que podría purgar su culpa, si fuese a servir al rey de Micenas, su primo Euristeo. Éste ordenó, en principio diez trabajos, pero dos no se los tomó en cuenta por haber recibido ayuda externa para realizarlos. Así fue le sumó dos más.

Hera y Euristeo

De algún modo se lo consideró inimputable y se le otorgó el beneficio de lo que hoy sería una probation, como si se tratase de un caso delictivo menor. El emparentado monarca le impuso como desafío una serie de tareas de muy difícil realización y cumplimiento: los trabajos de Hércules. Todos ellos remiten a Hera, por la región o el viviente involucrado. Siempre son violentas, pues implican robo o muerte.

El tercero de los trabajos encargados por Euristeo fue la captura del Jabalí de Erimanto. Según relatos mitológicos, éste era un animal que causaba estragos en la región, por sus malos hábitos alimenticios, pues era antropófago. Este ser fantástico enorme poseía una fuerza descomunal, lo cual lo hacía temible.

El Jabalí de Erimanto

Esta tarea (para algunos autores la cuarta) se vio demorada por el encuentro con el sabio centauro Folo, quien tiempo atrás había sido su amigo. Con él como con un compañero compartió el pan y el vino. Pero el olor del alcohol atrajo a sus híbridos congéneres y luego su vapor los enfureció. Hércules, los dispersó, después de matar a algunos de ellos, a los que posteriormente, con el debido respeto, enterró.

Centauro Folo

El héroe retomó su senda y reemprendió la búsqueda de la bestia fantástica. Encontró su rastro, siguió sus huellas y después de acorralarla, le saltó sobre el lomo, la golpeó con una clava y la amarró. A esto le sucedió llevar a su presa encadenada a la ciudad. Hércules mismo la cargó sobre sus hombros y la llevó hasta Micenas  para dar satisfacción a la curiosidad del rey mandante, como muesta la pintura.

Heracles y el Jabalí de Erimanto – F. de Zurbarán

Sobre la causa verdadera del destino fatal del centauro Folo no hay versiones que sean coincidentes. Una de ellas hace referencia a que una flecha perdida de las arrojadas por Hércules contra el jabalí, lo alcanzó y, como estaba envenenada, le causó la muerte. Pero hay más variantes.

Centauro herido – F. Lippi

Apolodoro contó que el híbrido, mientras maravillado examinaba esa pequeña cosa que tenía efectos tan nocivos y fatales, se hirió involuntaria y accidentalmente a sí mismo, con los mismos indeseables resultados. El otro sabio y buen centauro, Quirón, por la misma razón, y para poner fin a su sufrimiento, prefirió la muerte.

Palas Atenea y el centauro – Sandro Botticelli

El siguiente trabajo de Hércules, el cuarto (o el tercero, segúnla lista considerada) fue la captura de la Cierva de Cerinea. Ella había sido consagrada a Artemisa (Diana cazadora) quien no pudo atarla a su carro. Se cuenta que consiguió escapar ,pues era un animal fantásticamente veloz, cuyos cuernos eran de oro y sus pezuñas de bronce.

Hércules y la cierva sagrada de Artemisa

El héroe no debía derramar ni una gota de sangre de la fabulosa criatura, para que  al capturarla, no ofendiese a la diosa y provocase su castigo. El semidiós consiguió atraparla e inmovilizarla en el abrevadero. Así pudo llevarla ante el rey Euristeo de Micenas, que el oráculo había hecho su amo, por intercesión de Hera.

La cierva sagrada de Artemisa y Hércules – H. Aldegrever

Pero aún faltaba mucho más para cumplir con su labor. Fue por eso que el cine de aventuras no pudo eludir la atracción de Hércules, razón por la cual hizo muchas recreaciones de las hazañas del mitológico héroe. La TV siguió ese ejemplo. Más recientemente los dibujos animados y las historietas (comics) lo acercaron al público infantil. La escritora Agatha Cristie transformó al semidiós en Hércules Poirot, protagonista de su  novela policial Los trabajos de Hércules.

Hércules y la cierva sagrada – J.M. Félix Magdalena